viernes, 29 de mayo de 2009

"En tus manos encomiendo mi..." ¿En manos de quién estamos?
Ni todo el vómito ni todas la expresiones de repudio pueden expresar con puntualidad lo que sentimos quienes creemos realmente en las autoridades que la mayoría hemos elegido para que estén al frente de los trabajos de nuestros pueblos. Lo digo por que es verdaderamente espeluznante enterarse que Munícipes, que velan por el bien de todo un pueblo, están más que coludidos con el crimen organizado y con el narcotráfico. Ahora resulta que no sólo es la corrupción del sistema lo que rompe la integridad de algunos servidores públicos, sino que se ha trasladado al plano de la perversión, del actuar sin escrúpulos. Con toda razón nos hemos de indignar por la realidad que golpea hoy el ánimo de los electores, pero este hastío no debe ser motivo de abstención, debemos seguir creyendo en la democracia como la forma menos imperfecta de gobierno. Ante la cuestión de ¿en manos de quién estamos? hay qué decir que seguimos estando en nuestras propias manos, nuestro destino sigue siendo desición propia. Que la manifestación de nuestro repudio por la carroña electoral y política que hoy sufrimos sea por medio de un sufragio responsable y coherente.

jueves, 28 de mayo de 2009

"Anduve queriendo un rato
hasta que me decidí a Amar,
desde entonces, vivo".
Es poco menos que increíble cómo cambian las cosas cuando la calidad de los afectos toma una creciente. Por que a pesar de los ataques que sufre la racionalidad humana con la irracionalidad del mundo, Amar, es mucho más que los cuidados paliativos, mejor que un alucinógeno, mejor que la enfermiza esperanza que sublima la religión. El amor tiene realidad, perdura y plenifica. El Amor es la salud del alma que hace del hombre un ser completo y acabado: las acotaciones de tiempo y espacio son nada cuando el hombre se hace conciente de ellas y las acepta; es entonces que Ama, por que vive, siente y disfruta de lo que verdaderamente es; un ser contradictorio, con existenciales limitaciones y deíficas experiencias. Sólo en el Amor del ser humano, la creación torna a su sentido originante. Por que todo brotó del Amor y hacie Él tiende.